El Ministerio de Transporte impulsa la recuperación de 700 kilómetros del Tren Norpatagónico, que se encuentran en mal estado, y en los que se implementará nueva tecnología, junto con la realización de obras de seguridad urbana.
El proyecto contempla una inversión estimada de 780 millones de dólares para intervenir las vías entre las ciudades de Bahía Blanca, en la provincia de Buenos Aires, y Añelo, en Neuquén, a través del sistema de participación público-privada (PPP) y con el objetivo de impulsar el desarrollo de Vaca Muerta y la sustentabilidad energética, además de potenciar el crecimiento de las economías regionales de toda la traza con la reducción de los costos logísticos.
Gracias a la nueva infraestructura, los trenes duplicarán la velocidad de operación, logrando disminuir los tiempos en los que se ve afectado el tránsito de las ciudades por el paso del tren.
Además, se espera que se reduzca a la mitad el tiempo de espera en los cruces que hoy representa una dificultad para el tránsito, sobre todo en los tejidos urbanos más poblados.
A las mejoras en el tránsito se suman las ventajas de las barreras automáticas, del cerramiento de vías y de la puesta en valor de los pasos a nivel, que mejorarán significativamente la seguridad en los cruces.
También aumentará la seguridad en las rutas de la región, ya que el tren reemplazará el uso de camiones.
Las obras tienen un plazo estimado de cuatro años, con lanzamiento de la licitación previsto para inicios del año próximo, y prevé la creación de más de 3.000 puestos de trabajo que darán impulso económico a las comunidades de Río Negro.