El presidente Mauricio Macri sostuvo que América latina tiene que "potenciar sus capacidades" y dar pasos concretos hacia la integración, "no solo en palabras", y ratificó el apoyo de los países de la región al pueblo de Venezuela.
Macri se pronunció en esos términos al hablar, en nombre de todos los Jefes de Estado presentes, en el brindis del almuerzo que ofreció Sebastián Piñera a los mandatarios visitantes tras su asunción como presidente de Chile.
"Presidente Sebastián Piñera, querido amigo, me toca a mí en nombre de los jefes de Gobierno, jefes de Estado, su Majestad, amigos, desearte la mayor de las suertes y el éxito en esta segunda Presidencia", dijo Macri.
Sostuvo que "nos toca a todos gobernar en tiempos de cambios profundos y dinámicos", que abren paso a nuevos desafíos y que también "generan oportunidades".
"Para capitalizarlas tenemos que empezar por mirarnos entre nosotros y potenciar todas nuestras capacidades como región, que las tenemos y muchas", señaló.
Pero consideró que esa actitud no debe reflejarse "solo en palabras", porque se han pronunciado "muchos discursos de integración latinoamericana que no terminaron siendo coherentes con las políticas que llevamos a cabo", advirtió.
"Acá tenemos que aumentar las inversiones que nos vinculen, aumentar el comercio, mejorar las infraestructuras y que ese camino de integración lleve a crear oportunidades de desarrollo y crecimiento para todos", afirmó.
Macri subrayó que América latina "es una región de paz", que tiene, además, "una enorme capacidad de aportar a la seguridad alimentaria y energética".
"Es una región donde reina la democracia y el respeto a los derechos humanos, con una excepción dolorosa que tenemos, de la cual nos estamos ocupando y tratando de apoyar al pueblo venezolano", agregó.
El Presidente señaló que "en ese camino hay muchísimo para conseguir y generar" en busca del objetivo que "todos queremos", que es construir "una región sin pobreza".
Macri asistió este mediodía a la ceremonia en la que la presidente saliente, Michelle Bachelet, transmitió el mando a su sucesor, Sebastián Piñera, en la sede del Congreso de Chile, en Valparaíso.
Antes de ese acto mantuvo una reunión con Piñera en el palacio Cerro Castillo, en Viña del Mar, en la que ambos ratificaron el compromiso de integración entre la Argentina y Chile.
En ese sentido dialogaron sobre las perspectivas de avanzar hacia un mejor aprovechamiento energético, la apertura de más pasos fronterizos y mecanismos de agilización aduanera.
Además, Macri se reunió con su par de Brasil, Michel Temer, con quien analizó las negociaciones en marcha para concretar el acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea.
El Presidente estuvo acompañado en ese encuentro, realizado en el Congreso de Chile, por el canciller Jorge Faurie y el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo.
La agenda del Jefe del Estado incluyó también una reunión con el diputado Julio Borges, ex presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, quien le expuso sobre la crítica situación que se vive en su país.
Macri se comprometió a llevar nuevamente la preocupación por Venezuela a la próxima reunión de la Cumbre de las Américas, convocada en Lima, Perú, el 13 y 14 de abril próximos.
Acompañado por la primera dama, Juliana Awada, Macri participó junto a los demás presidentes de la región y el rey emérito de España, Juan Carlos, de los actos protocolares desarrollados en el Congreso y luego asistió al almuerzo servido en la residencia presidencial en Viña del Mar.