El Gobierno reforzó la colaboración con las autoridades de Salta para asistir a la población afectada por las inundaciones por el desborde del río Pilcomayo, con el envío de un equipo médico, vehículos sanitarios y una partida de medicamentos.
Viajaron médicos, enfermeros, psicólogos, agentes de depósito de medicamentos y vehículos de apoyo logístico, entre ellos una ambulancia de terapia intensiva.
Fueron remitidos antibióticos, antinflamatorios y otros medicamentos, como clotrimoxazol, difenhidramina, eritromicina colirio, ibuprofeno, fluconazol, mebendazol, metronidazol, paracetamol, penicilina, salbutamol, sales de rehidratación oral, hierro y ácido fólico y pastillas potabilizadoras.
La Dirección Nacional de Emergencias (DINESA), dependiente de la cartera de Salud, fue la encargada de enviar los insumos a pedido del Ministerio de Salud de Salta.
El domingo pasado, la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ANLIS) despachó a la provincia sueros antiofídicos para atender eventuales mordeduras de serpientes.
Efectivos federales continuaban hoy realizando tareas de asistencia con el empleo de helicópteros provistos por Prefectura y Gendarmería.
A su vez, el Ministerio de Desarrollo Social colabora con la entrega de alimentos, agua potable, elementos de higiene personal y otros insumos de primera necesidad.
También participan en la emergencia agentes de Defensa Civil, bomberos y personal voluntario y la policía de la provincia.
El extremo noroeste de Salta está afectado por una crecida récord del río Pilcomayo, en especial la localidad de Santa Victoria Este.
El último parte oficial elaborado por el Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR), a cargo de la Secretaría de Protección Civil del Ministerio de Seguridad, señala que el número de evacuados supera las 2800 personas.
Los damnificados fueron distribuidos en los centros de evacuados ubicados en Aguaray, La Curvita, Tartagal, Mosconi, Campo Durán y El Rosado, donde las fuerzas nacionales y provinciales actúan en forma coordinada para optimizar la asistencia.
En el campamento que el Ejército instaló junto a la ruta 54 las personas refugiadas cuentan con servicios esenciales y reciben atención sanitaria.
El PAMI, a su vez, inició un relevamiento entre la población evacuada y en riesgo para conocer la situación médica y social de sus afiliados.
Personal de Vialidad Nacional y provincial trabajaba en la reparación de la ruta provincial 13, mientras que la RP 54 se encuentra habilitada con precaución.
En Santa Victoria Este, fue constituido un Comité de Emergencia que se conforma por los ministerios y organismos nacionales, provinciales y municipales y distintas ONGs que intervienen en la emergencia.
En tanto, la Secretaría de Protección Civil se mantiene en comunicación permanente con las autoridades de Formosa, atenta a un eventual pedido de ayuda por las intensas lluvias y la crecida del Pilcomayo que afectan la localidad de Clorinda.
El SINAGIR señaló que los equipos están en alerta frente a la posibilidad de que el fin de semana se registren lluvias y tormentas fuertes en la región.
