Los científicos del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia (MACN- Conicet) revelaron durante este año la existencia de 149 especies nuevas como resultado del trabajo de campo, la preparación, curación, preservación y estudios genéticos y morfológicos.
Algunos de los descubrimientos más destacados que figuran en el informe correspondieron al área paleontológica, como el hallazgo en India del Shringasaurus indicus o la descripción del Teleocrater rhadinus, el antepasado más antiguo de las aves y los dinosaurios, ambos con la participación de Martín Ezcurra, investigador adjunto del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
También dentro del área paleontológica fue descripta una nueva familia de aves que convivió con los dinosaurios denominada por ellos con el nombre de Vegaviidae, pariente lejana de los patos actuales que habitaron los continentes del hemisferio austral.
Todavía en lo que respecta al hallazgo de restos fósiles, investigadores del Conicet en el MACN, junto a otros del Museo de La Plata y una investigadora del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales, participaron en la identificación y descripción del Calaichthys tehul, un pez que vivió hace más de 240 millones de años, encontrado en Mendoza en excelente estado de preservación.
La División de Aracnología del Área Zoología de Invertebrados fue la más prolífica en 2017 en la descripción de nuevas especies gracias a los invalorables aportes de investigadores, becarios y profesionales del Conicet, Martín Ramírez, Cristian Grismado, Matías Izquierdo y Luis Piacentini, quienes además participan en el armado de un ambicioso proyecto internacional que apuesta a sistematizar la historia completa de la evolución de las arañas.
Dentro de la misma división, también es destacable la descripción de un nuevo género de opilón -arácnidos similares a las arañas- hallado en Brasil, Relictopiolus, y de una nueva especie Relictopiolus galadriel, caracterizada por habitar exclusivamente en cuevas.
Otro hallazgo que adquirió gran relevancia fue el de la rana Hypsiboas punctatus, distinguida por tratarse del primer caso conocido de fluorescencia natural en anfibios.