El Ministerio de Transporte de la Nación anunció que el próximo 3 de julio el tren volverá a conectar Mar del Plata, la ciudad balnearia más importante de la costa, con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y otras localidades del interior bonaerense, tras dos años de interrupción por la caída de un puente.
Habrá un servicio todos los días desde Plaza Constitución hacia Mar del Plata, con salida a las 15.13 horas, y otro de vuelta a las 23.59.
El recorrido incluye paradas intermedias en Brandsen, Chascomús, Lezama, Castelli, Sevigne, Dolores, General Guido, Maipú, Las Armas, Pirán, Vidal y Vivoratá.
La venta de pasajes para el mes de julio ya está disponible y comenzará a funcionar una nueva modalidad de bandas tarifarias, que permite que los precios puedan variar hasta un 50 por ciento por encima o por debajo de una tarifa de referencia, como ya funciona con otros medios de transporte, como por ejemplo aviones y colectivos.
Con este nuevo sistema, los pasajes a Mar del Plata costarán 200 pesos de lunes a jueves y 450 de viernes a domingos, y durante las vacaciones de invierno –del 17 al 28 de julio– la tarifa será de 450 pesos.
Además, los jubilados tienen un descuento del 40 por ciento, los menores de 12 años pagan la mitad del pasaje y los menores de tres que no ocupen asiento viajan gratis. A eso se suma que las compras a través de la página web www.sofse.gob.ar las tarifas tienen un descuento adicional del 5 por ciento.
Los boletos también pueden adquirirse en las boleterías de Plaza Constitución, Retiro, Once, Mar del Plata y en otros 43 puntos en el resto del país y el Gran Buenos Aires.
El servicio de trenes a Mar del Plata es posible gracia a las obras que, con una inversión de 1.300 millones de pesos, sirvieron para renovar 208 kilómetros de vías, lo que incluyó la colocación de rieles, 250.000 durmientes de hormigón y 600.000 toneladas de balasto, que son las piedras que actúan de base de los rieles y durmientes.
También se construyó un puente nuevo sobre el río Salado, de 250 metros de longitud y que reemplazó una estructura de hierro centenaria que estaba apoyada sobre columnas de ladrillos, y que había sido dañada tras una crecida en 2015.