Casi un tercio de los habitantes de la ciudad de Ushuaia se beneficiarán directamente con la planta potabilizadora Río Pipo, una obra con tecnología de última generación que beneficiará a más de 20.000 personas y garantizará el suministro de agua potable a futuras urbanizaciones.
El ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, encabezó el acto de puesta en marcha de la planta junto a la gobernadora de Tierra del Fuego, Rosana Bertone.
Es la más importante desde la inauguración de la planta potabilizadora del Valle de Andorra, en 1989, porque permitirá que la demanda de la capital provincial esté cubierta por los próximos 20 años.
Además, está previsto que a futuro Valle del Río Pipo sea ampliable en dos módulos adicionales idénticos.
“Estamos ejecutando en la provincia más de 60 obras públicas desde la Nación y esta es una muy importante porque se vincula con uno de los objetivos de gobierno: que el 100 por ciento de los argentinos tenga acceso al agua potable”, puntualizó Rogelio Frigerio.
Agregó que se trata de una obra financiada por el Fideicomiso Austral, con una inversión de casi 60 millones de pesos, que representa “un paso más en línea con los otros objetivos como las plantas de saneamiento y las cloacas”.
En la inauguración, acompañaron al ministro los secretarios de Vivienda, Domingo Amaya; y de Provincias, Alejandro Caldarelli, y los subsecretarios Lucas Delfino y Ezequiel Fernández Langan.