El jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Energía, Juan José Aranguren, recorrieron las instalaciones del Complejo Nuclear Atucha, en el partido bonaerense de Zárate, y destacaron la iniciativa del Gobierno de avanzar en nuevos proyectos para ampliar la capacidad del sistema energético nacional.
El jefe de Gabinete señaló que el funcionamiento de este complejo “implica el trabajo de muchos ingenieros argentinos, mucha capacitación e inteligencia aplicada”, y ratificó el objetivo del Gobierno de “avanzar en los nuevos proyectos”.
Con tres centrales nucleares en funcionamiento y otra en proyección, la Argentina es el único país de la región con capacidad de diseño, fabricación y exportación de productos nucleares.
La Argentina asumió el firme compromiso sostener el desarrollo nuclear para fines pacíficos y tiene un alto perfil en la aplicación de esta tecnología en salud, agro, gestión del agua y generación eléctrica, entre otras áreas.
El total de la producción de potencia eléctrica bruta de la compañía es de 1750 MW. Atucha I genera energía desde 1974, es la primera central nuclear de América Latina y actualmente cuenta con una potencia eléctrica bruta de 362 MW.
Emplea como combustible mezcla de uranio natural (0,72%) y uranio levemente enriquecido al 0,85 por ciento. En el mismo complejo se encuentra también la central Atucha II, que cuenta con una potencia de 745 MW, generada por reactores que utilizan uranio natural y agua pesada.
La firma estatal Nucleoléctrica Argentina S.A. tiene a su cargo la producción y comercialización de la energía producida por las centrales nucleares Atucha I, Atucha II y Embalse, y además es la responsable de la construcción de la cuarta planta nuclear.
Además, las centrales no emiten dióxido de carbono (CO2) ni otros gases que contribuyan al efecto invernadero, así como tampoco su funcionamiento o preservación dependen de factores estacionales o climáticos.